balneario

Los balnearios provienen de la época de los romanos, en aquella época los llamaban agua termal natural o agua con propiedades curativas. Eran muy utilizados incluso por los griegos, también se asegura que los egipcios conocían de las propiedades relajantes y curativas de este tipo de agua. Conocidos con el término ‘Thermae’ los romanos de la época imperial tomaban largos baños de agua caliente, sin importar si el agua era recalentada o provenía así de manera natural.

Usos de los balnearios

Hoy día lejos de los tiempos de los romanos, los balnearios son considerados por los especialistas como un centro de relajación que nos ayuda a encontrar un poco de paz en nuestro interior. Constituyen los lugares ideales para este tipo de encuentro con la paz, hay quienes incluso los llaman oasis de la tranquilidad.

Gracias a esto, la popularidad de los balnearios es altísima en estos últimos tiempos de urbanización y vida moderna que genera niveles de estrés en la población. Muchos recurren a estos centros termales para relax y encuentro con la paz, el agua de los mismos actúa de manera relajante y nutre la piel. Algunos centros de spa, incluso utilizan esta agua termal combinada con sesiones de masajes que hacen que el estrés y el agobio se diluyan. En estos espacios se combina la armonía con la acción curativa del agua, lo que produce que el estrés se marche por completo. Las estaciones termales o balnearios también actúan como centro de belleza, ya que nutren la piel y la regeneran de manera natural. Si lo que necesita es un tratamiento antiestrés entonces busca un balneario o centro de spa más cercano para poder salir del agobio diario. No olvides llevar tu traje de baño, gorra y toalla; aunque ellos suelen tener su propio material desechable para estética y spa. Si recurres a un spa, puedes pedir además un tratamiento de belleza facial o masaje corporal para después de ducharte en las aguas termales.